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Un llamado urgente a la acción

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En Ecuador, las ciudades de la Amazonia se han visto afectadas por la demanda de quema de gas por parte de la industria petrolera, causando problemas tanto de salud como ambientales. Amnistía Internacional (AI) y activistas locales advirtieron que el Estado no había logrado destruir cientos de bengalas desechadas, un tema importante en la Asamblea.

en 2021 en julio Un tribunal de la provincia amazónica de Sucumbíos falló a favor de un grupo de niños amazónicos que solicitaron medidas de protección para detener el funcionamiento de máquinas que afectan negativamente la salud y el medio ambiente. Esta resolución enfatizó la importancia de respetar los derechos de la naturaleza, reconocidos en la Constitución ecuatoriana desde 2008, y decidió eliminar progresivamente la práctica para 2030, así como implementar medidas de reparación inmediata.

Sin embargo, según AI, la industria petrolera ecuatoriana ha pretendido cumplir con estas disposiciones legales sin lograr mejoras significativas para las comunidades locales y el ecosistema amazónico. A pesar de las afirmaciones del ex Ministro de Energía de que algunos de los equipos han sido retirados y desmantelados, los informes sugieren que algunos de los misiles retirados han sido reemplazados por misiles a nivel del suelo, que continúan contribuyendo a la contaminación.

La investigadora en inteligencia artificial Alicia Moncada condenó la operación fraudulenta y criticó al país por incumplir los compromisos internacionales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). La quema de gas en máquinas petroleras no sólo contamina el medio ambiente local, sino que también contribuye al calentamiento global, lo que va en contra de los esfuerzos globales para combatir el cambio climático.

Amnistía Internacional, a través de su directora para las Américas, Ana Piquer, llamó al Estado ecuatoriano a detener la quema rutinaria de gas en máquinas petroleras, que pone en peligro la Amazonía, el planeta y el futuro de las generaciones futuras. Activistas climáticos locales como Jamileth Jurado han compartido relatos impactantes sobre la contaminación y los efectos en la salud de las comunidades cercanas a las plataformas petroleras.

En este escenario, es fundamental tomar medidas urgentes para eliminar el impacto negativo de la industria petrolera en las ciudades del Ecuador amazónico. La protección del medio ambiente, la salud de las comunidades locales y la observancia de los derechos naturales deben ser las prioridades del Estado y de las empresas involucradas en este tema.

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